Desde hace año y pico, y a la vejez viruela (rondando la treintena), a mi hermano Victor le han diagnosticado intolerancia a la lactosa.
El caso, que él no es muy pastelero pero ahora menos. Y os podréis imaginar que no prueba nada de lo que preparo porque lleva leche, o nata, o mantequilla, o derivados.
Pues ya ha habido dos ocasiones en las que le he preparado cositas que puede comer (incluida tarta para su cumpleaños).
Por si tenéis el mismo problema, aquí os dejo las recetas de las magdalenas de canela y del bizcocho de chocolate y plátano (para que decoréis una tarta a vuestro gusto, aunque yo lo hiciera rellenando de platano y cubriendo con merengue).
Para las magdalenas de canela se necesitan 115 mL de aceite de girasol, 220 g de azúcar, 220 g de harina, 3 huevos L, 1'5 cucharaditas de levadura, 120 mL de zumo de naranja y 0'5 cucharaditas de canela en polvo.
La elaboración es como para cualquier magdalena: Precalentar el horno a 180 ºC (dependerá del horno) y tamizar la harina con la levadura y la canela. A parte, batir (con la batidora, no hace falta amasadora) los huevos con el azúcar y el aceite. Añadir a esta mezcla la mitad de la de harina y mezclar. Hacer lo propio con el zumo de naranja y, para terminar, incorporar la harina restante.
Colocar la mezcla en una bandeja para magdalenas con cápsulas de papel y hornear unos 20 minutos (y me repito, dependerá del horno).
Y quedan así de jugositas y ricas . . .
Para el bizcocho de chocolate y plátano (receta de Alma Obregón) se necesitarán 300 mL de aceite de girasol, 300 g de harina, 3 cucaradas de cacao puro en polvo, 3 cucharaditas de levadura, 6 huevos L, el puré de 3 plátanos muy maduros y una porción de almibar de ron (a fuego medio, calentar 100 mL de agua con 70 mL de ron y 100 g de azúcar hasta que se disuelva todo el azúcar).
Mientras se precalienta el horno a 180 ºC, engrasar y enharinar un molde, y tamizar la harina con el cacao y la levadura. Con la batidora, mezclar los huevos con el azúcar y el aceite hasta que se aclare la mezcla. Incorporar el tamizado con unos pocos movimientos envolventes y añadir el puré de plátano. Verter la mezcla en el horno y hornear (en mi horno) 60 minutos a 160 ºC. Al sacarlo, y en caliente, bañar el bizcocho con el almibar y dejar enfriar antes de desmoldar.
El resultado es muy bueno y bastante fácil. Así que ya no hay excusa.
Que los disfrutéis. Hasta pronto.
No me atrevo con la tarta, pero me quedo con la receta de las magdalenas y ten por seguro que pretendo hacerlas. Estan buenísimas.
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