Uno de los últimos cursos a los que he asistido fue para aprender a hacer macaronias.
Sí sí, esos pequeños pastelillos franceses (macarons) de merengue y almendra, con deliciosos rellenos.
Pues descubrí que, a parte de ser bastante complicadillos de hacer, dependen mucho de la humedad ambiental (lo que supone un problema en días lluviosos o en lugares húmedos).
Pero os enseño los que hice y seguiré experimentando.
La verdad es que son muy bonitos y, después de lo que cuesta hacerlos, casi da pena comerlos.
Hasta pronto.
Hola quisiera saber si para mi, que soy poco experta en cocina, resultarian muy complicados.
ResponderEliminarMe atraen mucho su forma, deben estar deliciosos.