lunes, 10 de octubre de 2011

La Pecera de Corti

¿Os habéis dado cuenta de que en muchas ocasiones se usan objetos destinados para una cosa dándoles una utilidad totalmente distinta?

Es lo que me ha pasado a mí con el jarrón Bladet de Ikea...


En mi caso, se ha convertido en una maravillosa pecera. ¡¡Sí, sí!!, una pecera. Puede resultar obvio pero estuve dándole muchas vueltas hasta decidirme.

No quería un enorme acuario rectangular ni la típica pecera de globo. Así que cuando vi el jarrón se me encendió la bombilla. Y con un jarrón, un foco de luz (en realidad, un foco de pinza para escritorio con una bombilla de bajo consumo pero luz muy blanca, es decir, con un número de lumens o grados kelvin alto),  un sencillo sistema de filtración (en realidad lo más caro de la pecera) y un poco de arena, plantas y decoración...¡TACHAN!,nació mi pecera:



Elegí guppys para el acuario porque son resistentes, versátiles y muy coloridos. Y tan bien me ha salido que a las dos semanas de tenerlos me encontré con una sorpresa...



¡Tengo pescaditos! Lo que no sé cuanto durarán porque en esta especie existe el canibalismo. En fin, nada es perfecto.

Así que ya sabéis, todo lo que veáis se puede convertir en OTRA COSA.

Hasta pronto.

2 comentarios:

  1. La idea de la pecera me parece maravillosa, toda nuestra familia somos muy adictos a la acuariofilia. Pero son materiales muy voluminosos y tienen mucho gasto. De esta forma en pequeño espacio tienes lo que tú siempre querías. Enhorabuena, lo has conseguido.

    ResponderEliminar
  2. Te ha quedado genial!. ¡¿Y la satisfacción qué da el dar uso a cosas que en principio te pensabas que no tenían?!. Se chisporrotea de emoción. Chispas.

    ResponderEliminar