Que tiempos aquellos en los que las joyas no eran de oro y diamantes. Cualquier cosa valía para llevarla al cuello o en la muñeca.
Se pueden rememorar aquellos tiempos si en vacaciones se recogen conchas por la playa.
El material, a parte de un cordoncito para después lucir estos complementos de valor incalculable, son bien simples...
Y poco más que decir. A personalizar conchas se ha dicho.
Además, esta es una actividad que se puede realizar con niños y puede llenar tardes de verano.
Hasta pronto.
Que cosa más bonita de cara al verano. Ahora seguro que cuando vaya a la playa recolectaré conchas para intentarlo yo tambien.
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